sabiendo como reaccionaria igual se queda callado esperando que llegue su hombria por correo. ya compro las balas en la tienda local y espera con paciencia el dia que le pegue un tiro a su profesora de matematica.
"juraba que el dia que su madre estaba desesperada era sociologa
y ni un amigo vino de tercer año unos dias sin nombre
inevitablemente ella quedaba sin orillas al poco tiempo
yo, cuento como mas o menos hiriente, escoltado de cualquier modo"
a ver si el profesor de literatura entiende que borges no se murió.
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